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martes, 14 de junio de 2016

La BCC rueda en La esperada

La BCC, la novísima productora de vídeos, con canal propio en youtube cuyo nombre responde al de "Better Call Carmen", y con el magnífico afán altruísta de acercar la legalidad vigente al ciudadano común español, me ha ofrecido una oportunidad única, la de rodar algunos exteriores en este lugar donde vivo, el paraíso que los lectores de mis poemas y los veedores de mis fotografías identifican, el que yo misma también identifico como metáfora del paraíso interior que todos llevamos dentro, un paraíso construido a base de lágrimas, sudor y mucho amor, un paraíso  regalado por nadie.

Me emociona que este lugar sea visto por otros ojos que los de mi cámara, y me sorprende, gratísimamente, que alguien dedicado a algo tan aparente frío como la ley, haya sabido transmitir a sus seguidores y fans el verdadero paraíso de este mismo paraíso: la ternura y la alegría.

Gracias BCC, con productoras como tú,  España SÍ IRÍA BIEN.
Y el mundo entero.

Te como a besos.

domingo, 9 de marzo de 2014

Dolores de en-tuerto

Cuando me sentaba en este mismo escritorio, mis letras eran jóvenes. Desde los dieciocho a los veintinueve anduve (porque andaba, seguía caminando por muy sentada que estuviera) con la compañía de esta mesa y esta misma silla. Con él, y sobre ellas, estudié mis últimos años de carrera. Con él, y sobre ellas, escribí mi tesis de licenciatura, y tantas cartas como días contienen seis años. Es, y se trata en realidad, de mi escritorio de toda la vida. o del escritorio de toda mi vida, que quizás hoy se cierra. Hoy, sin preverlo, se ha vuelto a recomponer, bajo el sol de un día deslumbrante. La mesa, ya algo desvencijada, provenía de las pertenencias de mi abuelo. Sobre ella aparecía siempre lustrosa su máquina de escribir, una preciosa underwood donde me destrozaba los dedos intentando mis primeros ejetcicios con semejante armatoste. entre tecla y tecla casi cabía la mano de la niña de dies años q se afanaba en comprender el funcionamiento del artilugio. Hoy ya desaparecida, la mesa q la sostenía forma parte del mobiliario auxiliar de esta casa de campo. Sus cajones encierran o protegen alguna colección de mecheros, útiles de imprenta, papel de cartas, folios de colores... La silla, que fue fabricada por un tío carpintero expresamente para "las niñas", proviene del desmantelamiento de la casa de mi madre, inexistentes ya, la casa y mi madre. Ella la usaba, una vez q yo dejé de vivir allí, como auxiliar de cuarto de baño: depósito para algún  primoroso neceser  y asiento para su descanso cuando se asfixiaba al caminar ( un paso) de la ducha al lavabo.
Hoy se reúnen al sol de Marzo, mesa y silla. Vuelven a lo q fueron aunque el escenario sea completamente distinto, en apariencia. Un dardo doliente, punzante, pero de aspecto tan suave como una pluma se me ha clavado. Son las traiciones de la costra dura de la nomenclatura. Por eso mismo nunca megustaron los cactus. Llamar amor a lo q hiere.
Me pregunto por la escena de la paradoja y lo verdadero. Sol, resfríos, punzones, ayeres, presentes, vientre, mi ojo derecho medio ciego y algún sombrero... Pero siempre poder verlos. Aunque solo sea con un ojo. Poder verme. La injusticia, la crueldad, la tortura tienen nombre de miedo y de carencia de uno mismo. No los deseo en mi vida. Todo duele hasta que se recompone, vuelven a su amor, a su ser, a la luz... Tan solo hay que esperar.



lunes, 24 de febrero de 2014

Lluvia

Llueve, de noche y de pronto. Salgo un momento y de pronto llueve. Y de pronto todo es sinónimo de victoria. La lluvia, el silencio, la noche. Llueve. Cae el cielo. Y con él, mi derrota.

martes, 11 de febrero de 2014

El primer amor

Para los que presentimos no hay mayor dolor que el no saber. Mienten y yo misma miento cuando afirmo que el conocimiento conlleva el dolor. Es cierto que si se sabe o se llega a conocer, la verdad suele darnos un bofetón. Pero solo si hemos vivido engañados por nuestras mismas mentiras. La verdad solo tiene el color del bien y el conocer es el motor de su alimento. Solo hay una, pero no es escasa sino generosa. Sin embargo, es desdeñada por la mayoría. Pobre y sola verdad, tan sola, ay, tan sola... Cuando es el único consuelo, la paz de vida, el amor a nosotros mismos.  El primer amor. El más importante.

viernes, 31 de enero de 2014

Desnortado

La noche ha sido amorosa con los brotes de los rosales. La fina lluvia con que se ha vestido ha servido para cubrirlos con un cálido manto de abrigo. Todo tibio. Todo calmo. Salvo mis pensamientos que supieron llegar a su punto de ebullición necesario y justo para obligarme a saltar de la cama de madrugada.
Casi obsceno, por frío y alejado ya, me parece el recuerdo de ayer. Los cipreses volaban. No vivo en Siberia, pero la sensación térmica para alguien del sur era la misma que si estuviera allí. Tan frío su desierto silencio. Tan sonora la estampida en la huida del viento intentando alejarse del hielo del norte.
Temí por los brotes de los rosales. Pero la noche los ha protegido. A mí también. He destilado con el alambique la esencia que me construye.  He cosido con retales de colchas viejas una nueva ropa de camilla. Retales de mi vida que me explican por fin: Porque soy verdad, las farsas se derrumban nada más aparezco. Así, es comprensible tu huida. Como la del viento de un norte.

sábado, 16 de noviembre de 2013

La clave está en los árboles

El árbol que me suministró sombra durante muchos veranos, hoy me calienta. Mañana de noviembre tan fría como los huesos de los muertos, como el propio árbol seco.

viernes, 15 de noviembre de 2013

La mirada dividida

No solo cuido el jardín. El bosque necesita mis manos, si es que quiero poder seguir siendo. Me agradece la intervención de hace seis años, y hasta me recompensa con un acebuche nacido sin mi cuidado. Los peligros son nimios. El cordón umbilical une mi mirada.

jueves, 14 de noviembre de 2013

El hombre extasiado

El que no se cansa de contemplar. El lector enganchado. El mejor libro es la naturaleza.

Oh pura encendida

Hice ayer múltiples disparos sobre la pequeña rosa. Esperaba a que se abriera para comprobar su color.La compré hace dos años movida por el q ahora luce. Sin embargo, en Sevilla nacía siempre de color amarillo, ni un matiz de color rosa. Ahora, ya en el campo, ha vuelto a ser ella. Qué tendrá la naturaleza que nos reconcilia con nuestra esencia? Ayer hice múltiples disparos. Encendí el ordenador por la noche con la idea de hacer alguna fotografía. Sin embargo me conformé con verlos. Sigo frenándome en cualquier intento de creación. Me freno o es que mi verdadero ser es la simple contemplación? No termino de maquetar el nuevo libro. Prefiero coser, podar, cavar... Cuál es mi trabajo, te pregunto, oh pura encendida rosa, émula de la llama...

sábado, 18 de diciembre de 2010

Panorámica retrospectiva

Se trata de la única panorámica que he hecho en mi vida, "a mano", cuatro fotografías montadas una sobre otra si no recuerdo mal. Nunca me han ido, ni me van, los cachivaches (algunos buenos amigos los llaman mariconadas) con los que los programas de fotografías engrosan sus gigas, ni los automatismos, ni las historias de ese tipo. A veces pienso que edito (revelo) fotografías como cuando a veces cosía, prescindiendo de la rapidez de la máquina por el mero disfrute de hacer un ojal o un dobladillo a mano...
Lo representado: la zona del campo más doméstica, disparos desde el caminito de guijarros que llevaba al gallinero, sin trípode, evidentemente. Ahí escribí desde "Asesinos de almas" hasta "La presencia por la ausencia", "Son-ethos" y comencé "El paraíso imperdible" y el que le seguía, cuando ya sabía que nos volveríamos por fin a Sevilla, el escenario que igualmente dio nombre vía mi hijo (así se tenía puesto en el perfil de la xbox) al primer blog con el que inicié mi andadura por ellos, "unrealand", cuyas entradas están fundidas hoy en mi blog central.
Y donde disparé unas setenta mil posibles fotografías, la mayoría con mi vieja dimage 7.
Hoy está todo cinco años más grande y cinco años más viejo. Tengo muchas ganas de volver, pero aún hace mucho frío...no se me olvida el frío. Hasta menos 10 ºC cuando ya en los últimos años podía arrancar un coche que marcaba la temperatura ambiental en las luces de su salpicadero. Menos 10º C a 50 kilómetros de Sevilla son muchos "menos grados", demasiados.

 
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El cuarto claro by Sofía Serra Giráldez is licensed under a Creative Commons Reconocimiento-No comercial 3.0 España License.