Ayer hizo un año de su presentación. El segundo volumen de la trilogía "Suroeste", "La exploradora".
El tercero se publicó antes ("Los cabezos amarillos", 2019.) El primero, que dio nombre al ciclo poético, en 2015.
Todos en la editorial "Ediciones en Huida".
domingo, 14 de mayo de 2023
Rosa de libro III
lunes, 13 de febrero de 2023
"La exploradora" en las manos de Lluïsa Lladó
Fotografía de Lluïsa Lladó |
La obra "La exploradora" (Ediciones En Huída), que cierra la trilogía denominada "Suroeste" de la poeta Sofía Serra Giráldez , representa una verdadera autopsia del progreso humano desde diferentes ángulos personales, creativos, sociales, históricos, geográficos...Sofía se mediatiza por diferentes espacios y tiempos desde un vergel (su casa-matriz), rico en matices cromáticos y aromas, y explora la realidad cotidiana así como la que posee un significado universal.
La rosa, el ruiseñor y la encina son tres símbolos que la guían en este viaje introspectivo de reflexiones y de ajusticiamientos con lo que respecta a la condición humana, el arte de la escritura con su posición frente al mundo y a la perpetuidad de las especies, vistas desde un microscopio particular o un catalejo escritorio que escudriñan el cosmos atemporal.
Sofía, con el uso de un lenguaje culto nos ofrece su trashumancia con pasajes sensuales guarnecidos de sustantivos directos en contacto con la naturaleza.
Un libro que es prácticamente un tratado filosófico de la posición del creador divino o terrenal con lo que concierne a la existencia y un homenaje a su entorno donde se relativizan la magnitud de las cosas.
Un átomo desgranado. Un pétalo en una fotografía y una mujer capaz de rendir cuentas sin esperar nada a cambio.
Gracias, Sofía, al filo has dado.
miércoles, 23 de noviembre de 2022
Un poema de "La exploradora"
Yellosky
"Lloré y me lamenté viendo el lugar infrecuentado" (Empédocles).
algo he de hacer,
mas quieta sobre
mi abandono
me quedo suelta.
son los sabios visitadores
los mosquitos de esta noche,
la luz amarilla no los aleja
de tu carne. La puntilla en
la nuca me superó en la meta.
Llegó ella antes y yo
me quedé creo que allá
bajo la dorada bombilla
bajo el emparrado
mientras el mundo se hacía.
También perdí la cabeza
y algo de alma,
bajo la luz amarilla llegué
al lugar infrecuentado.
(Del libro "La exploradora". Ediciones en Huida, 2022)
Este libro se puede adquirir AQUÍ |
lunes, 31 de octubre de 2022
Recuerdo de la Feria (del Libro de Sevilla)
Para que no se me olvide.
Abajo, poema del libro.
Pero no recordaste
Cualquier ciudad transita
por mis manos
con las caricias de su lomo.
Ya apuntan modos
las dodecafónicas ingles,
se inscriben en el gozo
como las orugas que reptan
por los perfiles de las hojas,
doblándose
sobre sí mismas
amortiguan
el aroma de haber abrazado
donde más oprimen
los gestos:
el señuelo,
la bifurcación.
No hay otra palabra.
La verdadera huele.
Los techos indisponen
contra el cielo estrellado
y tú te cubres
con tejados a dos aguas.
Pero quién va decir
si el árbol o la mentira
crecen ajenos.
Mis manos y tus piernas
hacen tiempo lamiendo
la escarcha salvaje y antigua
que cubría la ciudad de las luces.
Desde aquí, desde este polvoriento camino,
voy preparando la partida
con espejos que no enluto
para no guardar
ominosos encierros
de otros lesos seres,
son sólo fantasmas sin
diafragma ni pulmones.
Algunos pútridos afanes
quedaron colgando del árbol
como bolas de navidad fuera
de temporada.
Tanta dejadez ausenta
el valle rico de la vertical memoria,
siempre verde y limpia
como el tiempo, nuestro compañero.
Este viejo camino
sin duda tránsito
como todos
los caminos
que llegan o hacemos,
este cansancio inaudito
solo se llama el poema
y se escribe
en dos palabras, o cinco:
mi hueco y tu lleno.
jueves, 27 de octubre de 2022
"La exploradora" en la Feria del Libro de Sevilla
Este sábado, día 29 de octubre, estaremos "La exploradora" y yo
en la Feria del Libro de Sevilla.
AQUÍ, para adquirirlo online
jueves, 23 de junio de 2022
Vídeo de lectura de un poema de "La exploradora" (Maná de carnívora)
Lectura del poema "Maná de carnívora"
El libro "La exploradora" se puede adquirir AQUÍ (o en cualquier librería encargándolo.)
domingo, 19 de junio de 2022
Un poema de "La exploradora" y otras viandas
Mis
labores
Escribo
para no cocinar
el
desastre intentar
restablecer
el crudo
equilibrio.
Pues sí
veremos sendas.
Ando de rota
en roto
en el tejido
seco
de la mata
de tu paso.
No quiero
estar llena
de amor más
que para ti:
Te sostengo
débil
y estudioso
en tu carta
de agobiantes
endorfinas
de vehementes
dosis
de equilibrio
que intentas
por donde te
veo venir
como un puño
de estrellas
que iluminan
la estancia
lúbrica y
eterna
del ciprés en
la orilla
del plano
verde
a una villa
cansada
llega
y no hay
suelo
o seto de
brezos
aquí en el
sur
afilan sus
hojas
hasta los
verdes rizomas del aire.
El cielo
tembló
y la nube se
deshizo
en lágrimas y
contradicciones,
o poesía.
por
alimentarlo.
(Del libro "La exploradora". Ediciones en Huida, 2022.)
AQUÍ puede adquirirse, o encargándolo en cualquier librería (distribuidora Malayerba)
viernes, 3 de junio de 2022
Lectura propia de dos poemas de "La exploradora"
Poema "La luz de los días (como un arbre nú)"
Poema "My country song"
El libro se puede adquirir AQUÍ o en cualquier librería encargándolo.
martes, 17 de mayo de 2022
Vídeos de la presentación de "La exploradora" y cuatro poemas que se leyeron durante el acto
Si se escucha (y, lógicamente, se visualiza) el vídeo que aparece en primer lugar se comprenderá que nada más tenga que decir. El segundo, mucho más breve, recoge la lectura de cuatro poemas del libro objeto de la presentación "La exploradora". Como soy consciente de que tiene algunas carencias de sonido, dejo abajo los textos de los poemas.
POEMAS LEÍDOS
Calzados
apenas un vestido conserva
la calle de tu gasa y tu aquiescencia
sutil sobre la vida y el deseo
de apresurar el paso tan suelto
sobre los adoquines tan blandos,
grises y malabares perpetuos:
la litoterapia late bajo tus plantas,
sol y dado porvenir
bajo las suelas de los zapatos:
pareciéramos muñecos
con derrotas automáticas,
tantas carcajadas suenan
auto-móviles las gargantas.
Medusa
Nadie me ha regalado un ramillete
de flores que llevarme al pecho.
No sé, la vida
sucede tantas ocasiones
tan injusta con las diosas
que no son de mármol…
Pero en Carrara triunfé.
Me aplastaron la ingle
como una lengua
de sapo. El príncipe
afiló su cincel
y el bloque de una tonelada
se desprendió de la cantera
limpia y mansamente.
Entonces llegó Miguel Ángel
y encontró su David
y su fama.
Pero tampoco me regaló ninguno
un ramillete de flores.
Siempre estoy sola
y aún no sé
en qué consiste la soledad
salvo en estar
sola, algo descabellada
—cada vez menos
sierpes me quedan—
y hacer Arte con mi mirada.
Negadas vacaciones
Todos salen de su patria
todos vuelven a su patria:
vacación se llama,
vacancy,
vacante,
disponible
lo vacío,
la libertad
vociferan.
vacantes, están todos
bacantes,
vagantes vacíos
de sí.
Vocación disponible
busca ocupante
libre.
Tendernos
ante ti
miento
ante mí
mas ella
no miente
el espas-
módico deseo
de sentir
mi bien
estar
contigo
en silencio
hacer
el silencio
tender
el puente azul y la yerba
se levanta
descansada
y fresca.
AQUÍ
puedes adquirir el libro
lunes, 16 de mayo de 2022
Ya disponible el libro "La exploradora"
Podéis adquirir el libro "La exploradora" picando AQUÍ, en la misma página de la editorial.
También podéis encargárselo a vuestra librero de confianza diciéndole al librero que lo pida a través de info@malahierbalibros.com (la distribuidora).
(En breve haré una entrada con dos vídeos sobre la presentación, que tuvo lugar este pasado 13 de mayo)
miércoles, 11 de mayo de 2022
Dos poemas de "La exploradora" y recordatorio de la presentación del libro
Os recuerdo a todos que este viernes día 13 de mayo de 2022 presentaremos en "La Carbonería" (Sevilla) el libro "La exploradora", segundo poemario pero tercer volumen de la trilogía "Suroeste", editado y publicado por Ediciones en Huida. (Abajo, el cartel.)
Ab-solución
El escudo toscano
miércoles, 20 de abril de 2022
lunes, 28 de marzo de 2022
De la seriedad de la exploradora
Del mosqueo con el levante al susto con la exploradora. Menuda mañana llevo, y eso que me niego a que me afecte el cambio en las horas. De horario de invierno al de verano, y yo aún con jerséis de cuello vuelto. Iba a dedicar el lapso de tiempo entre dos frentes de lluvia que ofrecía el día de hoy a hacer tareas de campo atrasadas, pero la llegada de las pruebas del libro ha conseguido alterarme el ánimo (nada difícil en mí, la verdad sea dicha), ponerme el corazón a cien y hacer que me encierre para sentarme en el ordenador y corregir. Sé bien que por parte del trabajo del editor, nada, o minucias. Sé que, por mi parte, ¡todo!, aunque hable en broma, medio en broma. De pensar que así ya en papel (por mucho que lea o escriba en medios electrónicos no consigo despegarme de las ventajas que le contemplo a la fisicidad del libro en papel) lo que sea que esté escrito va a perdurar para siempre…¿siempre? Bueno, me digo, siempre pueden salir ardiendo, mi ordenador y mis discos duros incluidos, la leche, Sofía, que no eres la Biblioteca de Alejandría, megalómana eres y, además, ¿cómo se van a quemar los libros? Los que yo tenga, vale, los puedes quemar en el candelón de los ramajos, pero los que adquieran los demás, ¿qué va a pasar?, ¿vas a ir metiendo fuego a cada casa particular para que desaparezcan? Joder contigo y tu “imaginación”. Ya podrías haberte dedicado a escribir novelas de misterio y suspense y catástrofes infinitas, ya que tanto te gustan las pelis esas, solo esas, por mucho que te hagas la mayor cada vez que las ves, en vez de escribir poesía. ¿O será que te provoca más miedo escribir (y, por tanto, publicar) poesía? Y lo que te va es la “marcha”. Seguro que sí, que lo que te pasa es eso, el miedo por la espina, el miedo por la columna vertebral, ¿miedo a qué? Miedo a equivocarte, no sabes si en la escritura o en la decisión de publicar, miedo a alzar la voz, miedo a sobresalir de tus archivos, tan caóticamente ordenados, miedo a dejar de ser voz eléctrica, etérea, pfff, una ventosidad en el infinito mar de aires que respiramos para tu libro llegar a ocupar un espacio de volumen en este Universo, no sé si infinito o no, en cualquier caso inabarcable. ¿Y qué mas da? Eso me digo, y qué mas da realmente… Comporta seriedad. Lo que haces te importa…no sé si gas licuado o aéreo, quizás aceite de girasol, que tanta falta hace, quizás agua y tierra, de lo que la exploradora sabe bastante, quizás físicas neuronas que logren mínimamente, minúsculamente, atómicamente, quarkmente (¡ah!, la exploradora) a comprendernos mejor los unos a los otros.
¡Y no importa que te equivoques, Sofía! De errores se construye el mundo, y el futuro, de sus correcciones.
Me pongo, no lo
digo más. Seriamente.
Corazón
encogido
las palabras
no rompen mi inquietud,
ni siquiera
los regalos del alba,
hasta los
sonidos de la calle
se han puesto
de acuerdo
en desafinar
esta sinfonía
no sé si de
adviento o retirada,
partida
avecilla de retorno
estrellándose
contra las paredes
de alambre.
Se cuartea la fina capa
de piel
endurecida que me describe
tu presencia
en el mundo,
un espasmo
quieto
que no
ilumina la estancia
donde te
ocultas,
el dónde está
se sienta en mi silla
y me desplaza
a otra geografía,
una geografía
demasiado apaisada
para este día
que averiguo estrecho
para la
medida de mi querencia
por ti.
Hoy es un día
muy serio.
(De "La exploradora")
martes, 22 de marzo de 2022
Las lluvias
Ríes
aunque llueva
Llueve y el agua limpia
tu reserva de gesto escondido
a las mieles
del triunfo.
Por un puñado
de monedas
que no coges,
conquistas el
favor del cielo
y de la
amante, mas, lo sabes,
tú siempre lo
sabes, no hay favor
que necesite
gesto
de tu honrada
boca ducha
en vociferar
cuando el gentío
te escinde y
esconde una y otra
vez, las
monedas almonedan
el aire, lo
subastan
al mejor
deporte:
¡qué perpetro
observado
sobre tu risa
centelleante!,
duermen los
armónicos sonidos
de la
lentitud del agua cayendo
sobre las
piedras y la verdina
aún por
nacer, tan someras.
Es decir, tan
ciertas.
Vierto caudal
sobre tu
honrosa
costumbre de
saludar
a la gota de
lluvia
que se
desvanece (vuela,
ella vuela
aunque caiga).
No hay
mejilla más alegre
que la mía
cuando se deposita
en tus labios
untados
con deslices
otoñales:
un dorado y
sabio verdor
que enrojece
al cielo nublado:
la ciudad nos
puso límites
de tejados,
pero tus dos aguas,
esa una sobre
tu mejilla derecha
y esa otra
sobre la izquierda,
continúan
silabeándome
el lenguaje
que comienzo
y no termina
cuando callo
mi continuo
no dejar de
mirarte.
(De "La exploradora")
viernes, 4 de marzo de 2022
"La exploradora", próximo libro
En breve lapsus de tiempo, saldrá publicado este poemario, "La exploradora" que forma parte de la trilogía "Suroeste". Aunque lanzado en último lugar, ocupa el segundo de los tres volúmenes y, como no podía ser de otra forma, lo acoge la Editorial "Ediciones en Huida" a la que le estoy muy agradecida por su apuesta e implicación.
Aquí, un poema del libro con su fotografía correspondiente:
miércoles, 19 de enero de 2022
Los efectos del frío
On the rocks
Vengo a
recordar
la venta del
mensaje.
La
hormigonera registra
los bramidos
de tu hombría.
No hubo
negación
de tu varonil
muerte.
La masacre
descansa
sobre pilares
de floja argamasa.
Descerebrados
el mito y la joya,
sitúo sobre
mi mesa de jaspe
reluciente tu
retrato.
A estas
alturas de mi diosa interna
reclamo mi
trozo de partida,
la salida que
me pertenece.
Estoy dispuesta
a compartir,
pero sólo invito
a hielo.
Quién nos
ocupa que me vendo
por dos
míseros reales
ojos, uno
para tasmearla,
otro para
pintar
la verónica
de tu ensalmo
en el rostro
cautivo.
La luz se
ablanda
como un canal
lechoso:
Es tu nombre
una insomne
grada,
la diosa
interna
se me rompe
fría.
(Sofía Serra)
martes, 11 de enero de 2022
Qlimate change
Cambio climático
Se
aclimatarán,
nos acostumbraremos
al cambio
brusco
de la vuelta
de su curva.
Es una esfera
menos perfecta,
pero su
pabellón matizado
ondea los
colores de la utopía.
El cieno y el
negro blando,
la metamorfosis
que sufre
la huella de
su redonda efigie
de planeta
invertido,
pues, ¿a
quién se le ocurre
diseñar una
figura convexa
para posarnos
a todos sobre ella?
Mejor
cóncava, así habríamos
cabido
redundados geométricamente:
por cielo,
las coronillas de los habitantes
de las
antípodas, el sol iluminaría
la tierra
desde nuestros pies, el suelo
sería
transparente y el mismo planeta
habría tenido
que desarrollar
una fuerza
centrípeta.
siempre en el
límite
del nife nos
posaríamos
sobre la de
hoy atmósfera,
poblaríamos
de pájaros
y nubes la
densidad
del núcleo de
ayer.
Si un mundo
cambia,
si un planeta
cambia,
¿por qué no
yo?
(Sofía Serra. "La exploradora".)
lunes, 3 de enero de 2022
Los vientos de la rosa (Variante "n")
A
los cuatro vientos
Amor de ojos al sol
y a la sombra, si me alejas
la presbicia de
mis bases,
¿de qué pie
cojearé yo
sino es de
ti, de tus tobillos
y de tu
orgullo?
No me
abandones en esta primavera
blanca tan
llena de lo mío.
Mira tú, que
no necesitas lentes,
que yo sin lo
tuyo claudico.
Al sur te
necesito,
y a los tres
que no se nombran
les pido tu
mirada:
que un punto convergente
de luz
traigan el frente
de tu perfil
a mi sitio.
Todo es
extraño: río
aunque llore
mares.
Todo
permanece salvo la espera.
Ella se va.
Yo me quedo
en tu rosa de
los vientos.
(Sofía Serra. De "La exploradora".)