Estoy loca de contenta, más, la verdad es que me he emocionado hasta la sangre cuando he visto que ¡por fin! el google earth, o sea, el satélite que sea, ha retratado el campo. El joío ha esperado a que me venga de allí para hacerlo, ¡justo catorce días después de volver para sevilla!, un 14 de agosto de 2009 según la fecha que dan. La última vez, primera, que lo hizo fue en verano del 2004, pero como la conexión en el campo era lentísima, yo tenía que conformarme con las instantáneas que me enviaba mi hermano sobre "el sitio"... y en el 2004 le faltaban a los árboles por crecer, esto por nombrar un detalle nimio, porque lo peor era que se cortaba a la mitad, las cámaras del satélite no recogían más.
Yo no hablo, yo lo he visto todo, hasta la vereda que mis pasos hicieron desde el la casetilla del pozo de abajo hasta la cerca, que era donde estaba y está la llave de paso que dejaba o no pasar agua de la red "urbana"...Hasta la encina seca fuera de las lindes veo...
... es que aún tengo las lágrimas saltadas...
En la primera dejo señalado lo que es la hectárea en sí donde vivía. En la última lo que es la zona de huerto ( en rojo), y la zona de grama entre las casa (en verde), que en un 14 de agosto y tras 15 días sin regarla, pues simplemente aparece más amarilla, (no se pierde, sale en cuanto llueve).
Ya sé que sólo yo puedo entenderlo, pero si por ejemplo fuera señalando ese pequeño espacio con banderines por cada una de las fotografías que fui haciendo durante los siete años que viví en él, simplemente el terreno no se vería...
Aquí señalado en rojo el terreno en sí
Ésta para que se pueda ver la encina seca
Ésta por una vista general más cercana (cómo se distingue el verde distinto del follaje del único alcornoque centenario en toda la finca)
Y aquí el huerto en rojo y en verde la zona entre casa y cocina
con su emparrado (hasta su toldo azulón se distingue)
Si alguien quiere que le señale algo, sin problemas y con mucho gusto, es que no puedo ni escribir ahora, las cervicales se me han clavado, somatización de las emociones.
Ahora voy a buscar la azotea de esta casa, para tomarme un ibuprofeno, ;)
( Y sí, el parasol fotografiado
aquí y en otras más, y en otras que ya no existen, lo usé alguna vez cuando desde allí iba caminando hasta la aldea a hacer alguna compra, regalo de una de mis hermanas, una sombrilla china.)
Lo que no dejo señalado ni dicho son las cuatro torretas con camuflaje holográfico que tengo instaladas y que incorporan los últimos adelantos en sensores más allá del rojo, luz nocturna y mandos a distancias con alcance de 50 kms., misiles tierra-tierra incorporados...es decir, que VEO todo lo que por allí PASE con aviesas intenciones....
Más los vecinos, el teléfono permanentemente conectado con la torre más próxima del Infoca, el "enchufe" con la casa cuartel de la guardia civil del municipio más cercano y el mastín de cinco metros, claro.