los hombres tienen sed
y no doy abasto (el río)
Los todos mordemos
con firmes dentaduras:
aprehender
duras aguas al beber el llanto
de todo cristal gozoso
verde o negro
estallado por el viento inasible
de la iniquidad, la vesania
y la hambrienta injusticia.
Sus cristales se nos clavan
en la lengua antes de pronunciar
una reseca ignorancia más.
Aprendemos a masticar
con las llagas,
nadie nos emboca bajo
el puente de la libertad:
Sed de maestros, sed
de vosotros mismos.
Perteneceos.
Sofía Serra (De Suroeste)
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De cabaret sombrío, boca que dice no o bien no dice; ni hada. De ausencia tras esa noche y otra más más la penumbra; cabeza fina al fin, agua que hay y que halla; haya que corre y llega, alcanza; con el propósito del colmo y el del ser y el de ambos; la sed o el metal seco; o ese encuentro al fin o acaso esa amistad; el tiempo que va pasando conservador y torpe y tropezando; la espera acaso triste, lo insatisfecho o tibio; lo que no se hizo; las luces pero artificiales; el faro que no aclara, los viernes altivos y quietos de las robinsonas sevillanas.
ResponderEliminarLo de los viernes está inspirado del franchute Leo Ferré.
ResponderEliminar"...Beber el llanto..." y "...Aprendemos a masticar con las llagas..." Dos frases que me han dejado pensativo, aunque me gusta en especial la siguiente: "...nadie nos emboca bajo/ el puente de la libertad..."
ResponderEliminarUn abrazo y feliz viernes.