Ante la sensación de derrota, nuevos derroteros.
Se recuperan antiguos caminos
hoy de nuevo
Nuevos.
La cristalina sombra blanca
No te escindí
y una luciérnaga boca pasea
por el lúcido hilo.
Quieta emprende
quimeras
que
queman
y pueblan el filo
de la navaja.
La rosa y un poso claro.
Una benignidad con aroma de vino
madre. Vienen y van derrotas
aplastadas por el hilo
de la cristalina sombra blanca.
Ella no claudica.
Sofía Serra. Abril, 2011
Tweet |
[recorda-me o cristalino bater das asas, voo ínfimo das borboletas que sabem como preencher os sopros do mundo, como elaborar o tecido do vento,
ResponderEliminaro delicado sopro do vento]
um abraço,
Leonardo B.