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miércoles, 12 de junio de 2013

Aman(i)ta caesarea

Lloré y me lamenté viendo el lugar infrecuentado (Empédocles)

Aman(i)ta caesarea

muerto el hombre se domestica
la raíz el agua-fuerte levanta
la tierra aflora la adormidera
huevina, tanta yema, tan color
como el bokeh de Venus
cuando esta noche ha pasado
por delante del sol.
Como Afrodita, aunque sin quemarse.

Las tanas me recuerdan de dudas
la siembra de mis añadas mozas,
cuando aprendí a deletrear
m-a-d-r-e-s-e-l-v-a
tras haberme perfumado
en los maitines de mi madre
cuando ella llegaba del trabajo
con su vestido de enfermera
para echarlo a la lavadora
según yo dudaba y sembraba
pequeñas setas en el aire
de mi habitación a oscuras hasta hoy.

Si la yema, si la flor
sobre  la tierra,
un hongo puede ocupar kilómetros
bajo el  suelo y yo no me mido,
encuentro sol y me desnuco.

Así que no soy Venus.

Miro siempre de frente,
¿no veis mi tez morena?

lunes, 10 de junio de 2013

Poeta en Flandes

Poeta en Flandes

Antiguamente los poetas
sabían de mapas y rocas
y mares y guerras,
y hasta de amar.
Hoy hablan de ladrillos
teñidos de verde y algún
revolcón sobre el asfalto.
¿Dónde clavan su pica?

A los hombres les bastaba el silencio
en blanco hasta la última huella.

Me restan pocos años,
así que debo enmohecer
o fermentar,
aña-(d-i)-rme ya.

domingo, 9 de junio de 2013

La actitud

La actitud

He de levantar
la mirada me hace
parecer aún más
pequeña de lo que soy.

desde aquí ensimismada
en la junta del día sin noche
que despide a cómodos adversarios
como la almohada y la sábana
no escatimo ni versos ni recursos
para tratar de averiguarme dentro
de una piel que se ablanda,
la camicaze no se obstruye
con la estrella, sueña bajo tus dientes
tu aspereza de animal lejano
asociado a mis ideas, que tú y yo
culminemos como un darte y un goce,
una representación de nosotros
bajo el día que se enciende
sin interruptores. la luz natural,
la prostituta más vieja del mundo,
rejuvenece todos los días
para envejecer mis lamentos.

en depresión inquieta de voces
llegan malas dudas quebrando
el supuesto trampantojo, justificando
una absoluta serenidad, un manto
de dios inasible sobre mis hombros
deslucidos, afilados, desgastados
por tanto uso. murió a manos
de la espada del beneficio
inmediato, voy a la contra
de su sólida estela y pesado
cargo sobre mis riñones.
los soldados de los bronquios
redoblan su guardia de día.
Nunca toso. ellos me permiten
respirar para que no me ahogue
por tanto peso de mundo o peso
mío.

Es el tiempo que no hace vida,
pero la tuya fabricó andanadas
de segundos. hoy se equilibran
sobre la cuerda floja
que extiendes en el cielo
entre las dos torres: la de la
vanidad, la de la impaciencia.

viernes, 7 de junio de 2013

Camino del solsticio

Camino del solsticio

el mediodía

junio llegó como
un día común de
abanico rojo
al fregar el patio.

las girándulas de los extractores
—de esencias de cocina,
no de llantas de bicicleta—
batían las paredes del mediodía.
Los rieles del aire
descorrían el calor
mojando el lienzo
transparente de la vista,
de mi vista.

¿dónde estás eje mío?
¿dónde te arguyes
o te hincas
mis dos manos?

la mañana

leve así nace
la flor del jazmín
en el pezón
de la asustada
aurora. Me vengo
con ella y su aroma
extrayéndome.

la impresión fue traumática.
cede el filamento.
la catapulta lanzará
márgenes y aberturas
como islas grandes.

lunes, 3 de junio de 2013

El poeta es un Factor

Es que la poesía escrita no existe. Existen los versos, los poemas, los poemarios, la más o menos hábil asociación de palabras que la hacen evidente, o la manifiestan, pero no son la poesía en sí. La poesía en sí es un acto, el “traimiento” de lo verdadero a esta costra, el echar la otra mirada a las cosas o el hacer visible lo invisible. Evidenciar, hacer ver lo que no se ve. Ni siquiera el acto poético es poesía, la poesía es posterior y anterior a él, no es la obra, no está en ningún lado, sólo es mientras se percibe, por el creador o por el espectador. Eso es la poesía, un proceso por el que lo verdadero se hace evidente ante unos ojos distintos a, por ejemplo, los del que padece el apercibimiento. Bécquer decía “poesía eres tú”. Sin el tú la poesía no podría ni nombrarse para cada en sí mismo. El cerebro no encontraría accidente que llamar con esa palabra. El tú es la clave poética; por eso el poeta tiene que desdoblarse (honestamente siempre, na-tu-ral-men-te —El poeta no es un actor. El poeta es un factor. Hace—).

miércoles, 29 de mayo de 2013

Filatelia

Filatelia

Descomprimido y permanentemente
hueco levantas preámbulos
de dos manos de alzada.
Se te colaron los dioses
por la rabadilla, te introdujeron
la sinapsis a golpe de tendido
eléctrico sobre la camilla
de aquel pequeño huerto,
el cachorro durmiente abre
canicas como planetas
a la luz de un universo
negro que conocemos
sólo por postales con borde
sinuoso. La yema de mi índice
lo recorre sin padecer ni él
ni mi dedo. Un perfil podría dibujarse
entre la tierra y la luna
y no parecería el de un dios.
Enormes somos reduciendo
a sello lo que no abarcamos
con nuestros brazos.
La medida, para el coleccionista.

(Sofía Serra. De La exploradora)

martes, 28 de mayo de 2013

Posada de noche (I, II, III, IV)

Posada de noche (I, II, III, IV)

Variación I
Terminar una noche
con dolor de espalda
anclado al dominio
de una sentencia con agria
disconformidad. Escepticismo.
los pájaros duermen. Ellos saben
de horas. Menos el ruiseñor.
Aún resuena en el pensamiento
su dolor dulce de canto
en mi compañía. las encinas
y la noche azul. mi sentido
del olfato se enreda
en las madrugadas en rima
con el cielo y la tierra.
Una sola mujer sola
y toda la noche serrana
tan sólo extendida para ella.

Me pregunto si me recordará.
Y si sabrá volver a crearla.

Variación II
La habitación húmeda
sabía a polvo de huerto,
la casa cerrada se había hundido
en la tierra removida, sonaban
leves clarines con voces
astutas y alegres del zorro.
La yerba y la luna.
La falta de miedo en el suelo.
Mis pies frescos.

Variación III
Inabarcable como
el volumen
espaciado de la noche.
Tan libre azul
súbitamente se abarandó
el cielo nocturno,
azul siempre de negro
vestido para mí
y no matarme
al verme caminar
hacia el ruiseñor
célebre dulce íntimo
mío canto de amor
y consuelo. La plácida
belleza del bálsamo.
La recompensa.
Plenitud.


Variación IV
Despierto con el alegre canto del zorro. Las cinco de la mañana y dulce oscura la noche. Me levanto y voy hacia a la puerta. Al abrirla, mi piel se refresca con la caricia del aroma nocturno. El azul saborea mi mirada a la luna. Poso mis sienes sobre el canto del ruiseñor.
Las cinco y el campo me saluda. Buenos y nocturnos días de plenitud tras la guerra.

Sofía Serra (De La exploradora)

lunes, 27 de mayo de 2013

Comercial

Comercial

Siesta de índole indiscreta,
tetramundo
de la fuente hostil
beberemos hasta envenenarnos:
jamás claudicaré
ante la guerra
de tu olvido cúrame,
sáname,
dame
un pequeño precio.
Voy a vivir hecha
a tu compra.

Sofía Serra (De La exploradora)

martes, 21 de mayo de 2013

La esquina

La esquina

Se besaban
en la esquina
sobre los adoquines
el duro suelo
y su blanda alegría
se mecía entre su abrazo
sus lenguas y sus bocas
se besaban alegres
y blandos
los adoquines acunaban
el suelo de su beso
entre sus brazos.

No sé cuándo lo perdí, no sé cuándo lo perdí.
Sí sé cuándo lo perdí, sí sé cuándo lo perdí.

Tengo que pensar
en desasosiego
para volver a él,
desfallecer a la altura
del hombro de la vida, ceñir
el único paso
a tu calidad perpetua
de ente vacío
acostumbrado
a las señas
de un deseo, de un taimado
deseo de un vital
deseo de volver
la esquina.

Sofía Serra (De La exploradora)

jueves, 16 de mayo de 2013

El ruido y un silencio (lucy-on-the-earth-without-diamonds)

El ruido y un silencio
(lucy-on-the-earth-without-diamonds)


A Lucy

Alimentamos sabañones
que nos dejarán la piel
reventada en tiras de aluminio
que se enrollan añarándonos
la entrepierna y hasta las corvas.
Juntos cederemos al buen paso
de la bestia, tanta raedera
salvaje, mullida de dientes
en escala perfecta con boca
de titanes y jorobas
de escleróticos esqueletos.
¿Cómo se entrelazan
los tirabuzones de su afecto?

Hasta las calaveras se aman
con su boca a boca tecleante,
diente a diente,
hueso a hueso.

nadie puede saberlo.
si no se dice nada
es audible nadie
sabe de esta entraña
terrena.

Sofía Serra (La exploradora)

lunes, 6 de mayo de 2013

Le dicen fucking (el celo)

Le dicen fucking (el celo)

no sé cómo llamar esta extensión
de las sienes de mis pechos,
¿axilas? blancas
y voletantes, y andró-
medas se tornan
ahuecándose al paso
de tu saliva por mi corriente
venero
tu dentro
de este
adentro

y para cuando argüiste
la entrega me hizo agua
el gusano del desierto
de Dune y toda su fábrica
de especia
—esencia-especia-esencia
—, espacio
lleno.

yo no veo que nadie
enturbie el gozo.
tus dedos adormilados
y justos
donde más duele.
Ahí.

(Sofía Serra. De La exploradora)

El descanso

El descanso

el descanso se traduce
en tan ciertas bienvenidas
a tu boca aunque aún no
sé cómo logro recomer
esos labios tuyos
con dientes míos y mis cejas,
esas pestañas que culminan
un cielo de entrecejo
que me está vedado besar
mientras vuelco cadera
a lado vientre plano,
cómo este pubis
ventrílocuo —esa sonrisa
agua que sugieres, esa vuelta
lenta de tus hombros
hacia el pecho de mis sienes—
me sostiene siempre hablando
te.

Sofía Serra (De La exploradora)

viernes, 3 de mayo de 2013

mayales 1

mayales 1

0. Al fin y al cabo
que sujetaste
con la primera mano
es el tiempo de distancia,
la medida, la una
que nos separa.

1. wish you were
here es la paz
ahora mismo
no se hallan
dos en mí.

2. seremos dos
hasta que la luna
cierre sus tres ojos,
que no los posee.

3. llegará el día
para dios cantarnos
una nana al cobijo
de nuestro cuarto.

4. Sopesar y transgredir,
así nivela el canto su mirlo
son síntomas causantes
del peligro y la lágrima
rodante curva abajo
de un mundo que fue plano
antes de que él lo quintuplicara.

5. Al pabellón de mi oído cóncava
sien trasladada a tu seís-mo
como si el latido del hombre
naciente embrionara
patente de nuevo.

Sofía Serra (De La exploradora)

jueves, 2 de mayo de 2013

La transgresión

La transgresión

Nieva lejos si al menos
la ojeriza soleara
el entredicho.
Cómo comu
nicar-te-licán
tropa mía,
que debes renegar
de la luna, que ahora,
sólo ahora, se revuelve
contra sí misma tornándose
poeta de su misma luz
al verte en el empeño
desde un ti y un desde mí:
la frontera.

Pero dentro,
en los cielos ambos.

(Sofía Serra. De La exploradora)

martes, 23 de abril de 2013

Paseo

Paseo

apenas un vestido conserva
la calle de tu gasa y aquiescencia
sutil al deseo
de apresurar
el paso suelto
sobre los adoquines tan blandos
grises y malabares perpetuos:
la litoterapia late
bajo tus plantas.

sol y dado
porvenir
bajo las suelas.

pareciéramos muñecos
con derrotas automáticas,
tantas carcajadas suenan
automóviles las gargantas.

Sofía Serra (De La exploradora)

sábado, 20 de abril de 2013

Actitud

Actitud

ahora que avisa
me pregunto por el son
de tus mejillas cabeceando
junto a la estancia del salón
privado
de semejantes luces
tan pardillas,
dios y diablo
tan pardillos
casi se preguntaban
como yo hago ahora
por tu boca puente
y río
, sí.

río.

Sofía Serra (De La exploradora)

martes, 16 de abril de 2013

Liberta

Liberta

sin pies

normalmente las batallas del hombre
suceden en el límite entre la noche
de sus ojos y el día de sus manos.
si no sé ni dónde pisan mis pensamientos
mucho menos puedo pensar mis pies.

sin cabeza

se ha soltado la yunta
y ya no puedo arar.
Soy un animal
sin frente
ni amo.

sin cuerpo

Habiendo llegado al límite
qué hago ahora aquí.
soltar amarras e la nave va
sesgando y muy ciertos
agujeros la diluyen
en la salina transparencia.

sin palabras

mi mente catastrófica gobierna
su salida de este mundo inhóspito
y cruel pido un deseo
por todos los hombres
un abocarme
para deglutirme
por completo entiendo
pero no hay palabras
que me lo demuestren.

sin dios

en la inefabilidad de la sustancia
hallo la máquina del tiempo.
un soldado muerto me dijo:
no nombrarás
en vano.

Sofía Serra (De La exploradora)

jueves, 11 de abril de 2013

El equipo

El equipo

He hecho hoy
dos cosas importantes:

untarme crema en las manos
y la otra no la recuerdo ahora.

Ah, sí, fotografiar
un girasol.

(Sofía Serra. De La exploradora)

martes, 9 de abril de 2013

La exploradora occidental

La exploradora occidental

El pueblo se acercaba
flotando                     mientras llego
y no llego el sol se acaba
depositando               sus negras luces
transparentan
revientan
en cristalinas sombras
iluminando                el desconcierto
opaco y feroz la noche es
sin ausencia
clamando                   perturbar
el oeste y encamarse
en sus montañas persiste
cierta luminiscencia del océano
que arrastré en mi avenida
con sus lenguas verdes
y feraces.

vengo a decir
-te
a golpear
te
-dios.

Sofía Serra (De La exploradora)

domingo, 7 de abril de 2013

Fin de Suroeste. III (Abril, ¿quésinoAbril?)

Fin de Suroeste. III Abril, ¿quésinoAbril?

94 poemas para posicionarme. 94 habiendo suprimido ya algunos completos y muchos versos sueltos, amén de la eliminación de los fragmentos de prosa con reflexiones de toda índole que siempre voy dejando anotadas en el mismo archivo del documento del poemario que cursa. No sé cuantos miles de caracteres, de palabras, y cuántos espacios y tiempos de mi vida para tan sólo posicionarme.
Y toda la vida teniendo que oír que mi problema es la impaciencia, que me precipito ante las cosas, que voy demasiado ligera…
94 poemas.
Precipitarme sí me precipito — río—, pero ante el abismo.
94 poemas.
Quedarán en algunos menos. seis o siete no me convencen lo suficiente. Hago el índice a mano y señalo con interrogantes. próximo paso, segunda revisión.
El archivo ya va por el nombre de “suroestecorrigiendoindice-9”.

Y el blog ya no preveo más subida de poemas de suroeste al menos durante mucho tiempo tengo que comenzar a corregir la exploradora de hecho ya he comenzado me topo topos topos topos y sus montoncitos de tierra y el niño zapateando sobre uno de ellos cuando apenas tenía tres años no sabía que mataba sabía que tenía que hacerlo era inocente hoy consciente se dice ¡qué malo era! no no eras malo eras un niño muy bueno y nada dañino sólo instintivo valientenoteasustastecuandosetesubió al pie el ratoncito como siempre con pseudo poemas sueltos de presituación que no me gustan tienen su sentido pero no adquirieron la debida forma es el calentamiento antes de la carrera el curso nunca sé qué hacer con ellos hasta que de pronto encajan se terminan de hacer ya los atisbo no formarán parte del poemario de ninguno son los puentes de un poemario a otro y aunque constituyan un continuum todos ellos siempre tengo que saltar un abismo tal vez sea yo misma la que lo excave algo me dice que un poemario acaba y otro comienza pero nunca sé en qué consiste ese algo el trabajo seguir corrigiendo Suroeste ya con la seguridad de haberlo VISTO comenzar a corregir la exploradora seguir escribiendo “la clave está en los árboles”…

Sevilla, primavera, rinitis de domingo. Hace frío. No me resulta extraño. Recuerdo una helada en pleno Abril en el campo, hará unos 12 o 13 años. Dejó los plantones de tomates y pimientos recién sembrados para comerlos como fósiles desmenuzados. Aprendimos a esperar un par de semanas más para sembrarlos.
Pronto llegará el calor. Los pequeños rosalitos que tengo en la jardinera comenzarán a echar algún capullito. Amarillas, amarillas. El jazmín arrancará de una puñetera vez. Dará el sol en la ventana hasta la puerta, la luz se mueve, la luz se mueve, la luz se mueve. Y todos con ella, todos a su paso, todos a su tiempo. Es La Inhumana.
La única que sabe romper el tiempo, nuestro compañero.
Canto para esta era porque amo nuestro tiempo. Nunca existió otro mejor.
Lo sé porque soy historiadora.
El hombre siempre avanza.
el hombre cada día es más consciente.
el hombre cada día que pasa sabe amar mejor.
el hombre va aprendiendo a no tener miedo de sus semejantes.

Abril. ¡Qué sino Abril!

La gemela despierta de su letargo

me regalo prisa
porque quiero
dejar terminado
lo que no sé
ES
me urge saber
el comienzo
porque sé
que estoy en él
me sé
libre y nueva.

Estar segura de tu libertad
para poder vivir la mía.

Sofía Serra

 
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