Atrapas y tiestos que lanzas
aun con el viento ajando
rosas
y devolviendo
vida infranqueable.
Pro-bocadora.
¿Qué coyuntura habilitas
que administra vía extinta
para los dulces sabores,
la mecánica suerte
por la que siempre
de la horca
pendes,
con la condena de frente
y el juicio terciado
en la mitad de unas espaldas
a oscuras?
¿Qué tornillo desenroscas?
¿Qué relé desinhibes?
¿Qué bravo y soldado
a tus meninges puerto
te abriga cuando la noche,
urge la noche bogando
caída tras caída sobre la ola,
ya no te corteja
ni en la blanca cama?
navego bajo mares de hojaldrada
melancolía, capa sobre capa
apisonan cada músculo contracto
cerrando los párpados del aire.
Pero no la boca
no la boca
la boca no
amarga.
Tweet |
Siempre firmes tus versos y llenos de inquietud y de vida. Felicidades Sofía.
ResponderEliminarUn abrazo.