lunes, 28 de marzo de 2016

Los cabezos amarillos


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Los cabezos amarillos

De los rizomas aguados
al venerable panorama
de los iris sumergidos
como aflora el manantial
desde la tierra hunde
la llama vertical
del suelo de los cabezos,
las peinetas de la pleamar
azul, el blanco y el amarillo
solicitan un acebuche de sal
como las cañas verdes y dulces,
la arena de mi tierra y mi muralla.

Así fue aquel paisaje
donde me extendí ante tu vida,
o para ti.
Aún brotan
los siete colores terrenos,
la luz y el agua se encendieron a tu paso
para que yo recordase ahora.

Llega el mar a la playa
como llegaban desde el pueblo blanco
el cuaderno, los lápices, la bombona
de gas butano, los cuentos y sus regalos,
como si de las Indias vinieran,
y como india tan morena
como la torre que me guardaba.
No tan roca.
No tan alta.
Sí tan rota.
Sí tan permanente-
mente en la orilla.



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viernes, 18 de marzo de 2016

El lugar

El lugar

evadir a la palabra de su gasto,
anclarla al nivel de las posibilidades.
somatizar verbalmente,
pensar con mis dedos en tus labios.


allí estoy, el verde y el gris
del asfalto es mi plano,
miro mis botas y pienso
en las encinas sobresalen agujas
intermedias hincos
de palo untados de almizcle
venden mi alegría
a todo el que llega
a mis manos dispuestas
a obedecer
el salto desde la valla
subo a la piedra
madre oteo
qué será de mí
sino en ese templado horizonte.
lomas azules sueñan juntas
con mi recreo,
el descanso de un alma
al llegar al humilladero
de la desdicha.

pensativa inútil la paloma
me mira aunque yo no la divise.

es que no ha nacido
para la palabra sino
para unirse
a tu pecho
con el mío.



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viernes, 11 de marzo de 2016

Los jaramagos


Los jaramagos

Qué sola y triste
queda la mentira
cuando la verdad
la oculta.

A pesar de pesares
como tú, nos florecen
vejigas en las plantas
, leviatanes escondidos
como pequeños duendes
que nos hacen las cosquillas
necesarias para poder seguir
continuando vivos
maltrechos, o tú, sino,
porque la penuria de tu sino
es el menos de ti,
y no importa hallazgo
si bebo del manantial.

Ellos admiten dádivas, generosas
pulsaciones sobre el terreno frío
de la mula andante y negra.
Ella aplasta con sus herraduras
las flores amarillas cultivadas
erróneamente como especia.


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jueves, 3 de marzo de 2016

Aflorar

Aflorar

callo porque huelo
el hueco para olvidar.

I

bastando dar se reciben
puñados primeros
pétalos y guardas
de una mujer
joven.
Yo salgo si tú
me besas o me hundo
más bebida tu fragancia
de generosas emanaciones.
Huele a flor y nata
de misterio
bajo tus párpados.

se me escapa la boca
por los circuitos fluviales
de mi denso estero,
que también ya huele.
A regaliz.

todo es silencio en este mundo
lleno, tan lleno.
La paz y la última palabra
someten su aleteo universal
a tu ademán de reyes,
munífico ente
diurno y taciturno
hoy, mañana
ya veremos.

II

me arropo en tres palabras
nadando, buceando, tirando
de tus piernas,
llegar hasta donde tú
no quieras que es el fondo,
la pelvis plana de la tierra
pisando fuerte,
dar
la patada,
subir
y entonces expulsar
el aire que nos quede hasta
aflorar
al viento del Sur.

III

restablecer el equilibrio
hablando tus labios
someramente
escribir un beso
con la punta de mis sienes
sostener la yema viva
de tu mente,
aflorar a carne
viva esta agonía
que me padece
la palabra.


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