viernes, 14 de noviembre de 2014

Acceso

Acceso

esas pequeñas extremaunciones
con las que designas el dedo
de tu boca afila génesis
para que nos amemos,
algunas veces, algunas más
sobre tu ungida noche
sortean peregrinos
sobre la piedra calva
con apenas polvo,
y aquí, todo mar,
cuando yo te veo todo mar
cuanto tú me miras todo mar
cuando cabeceo abocada a ti
todo mar y ese vello que asoma
por tu axila todo mar
desde mis bebedizos de hambre
de tu garganta, paz
y aula cerrada
tu cóncava carne
entre mis manos todo mar,
todo mar y la arena junta
y viva junto a ti
y mi sereno.

que en un mar, y en este todo mar,
te acceda
la serena suerte de sentirte
amado.

jueves, 13 de noviembre de 2014

Sobre los comentarios en este blog

Pasada cierta y densa marea (la verdad es que comenzó sobre el 25 de julio) de comentarios procedentes de máquinas, al parecer, noruegas y estadounidenses, vuelvo a dejarlos tal como siempre han estado en este blog ( y el de fotografía), libres hasta para los anónimos. Incluyo el captcha tan solo por no tener que andar las 24 horas comprobando si cualquier tontería se ha colado al spam del mismo blogger.
Gracias.

Absolutamente tú

Absolutamente tú

tanta calma deshecha
al abrigo de tus prisiones
o presas o presiones suertes.
me desmadejo llegando

mientras hizo sólo sufrir.
te soplo discretamente
cabizbaja y ojerosa
se adhieren a mis costillas
hombres hermosos ha, se los llevó
la enfermedad pandémica
de

darte el lugar

tiene nombre
de silencio, óbito
de una propia muerte.

… En qué consistirá ser tú.

el mar y la estocada
en la arena…

la redundancia absoluta
y el desencuentro constante
encuentro de mi absoluto.

miércoles, 12 de noviembre de 2014

Sino abrir los ojos

Sino abrir los ojos

a dormir, corazón,
cantaba la canción.


Posar mis ojos en tu instante,
descubrir que el mundo
no se hizo en un día sino
en tus cuatro extremidades,
solventar aritmética de relojes
y gusanos universales horadando
las paralelas estancias que habitamos,
remedar sin pausa la lentitud de la flor
al abrirse, el remero de las olas
al habituar al mar
con su vehemente persistencia
y comunicar que no somos dioses sino
algarabías devaluadas
por nuestra especialidad en menospreciarnos,
y, así,
decaer nuestras manos
hasta que el otro no las halle.

Eso he vuelto a descubrir
hoy, nuevo hoy, el abismo
de nuevo, tu soledad.

martes, 11 de noviembre de 2014

Puesta de sol individual

Puesta de sol individual

A esa puesta de sol
aspiro, cuya mañana,
ya desdibujada, me depare
la lumbre del pacífico
despertar a la sombra
del árbol del amor
y sus rosadas transparencias:
la muerte bajo sus flores,
mi negativo sobre la pared
dorada y suelta
de un pensamiento sin luces,
de paz ataviada
de nadie y de nada.

A esa puesta des-
comunal muriente yo
a la luz del sol
que yendo yo
o él
me ilumine, exangües
él y yo.

Y solo tu suelo
vivo.
 
Creative Commons License
El cuarto claro by Sofía Serra Giráldez is licensed under a Creative Commons Reconocimiento-No comercial 3.0 España License.