miércoles, 14 de abril de 2010

De roja voz


Título de la fotografía: La flor de mi secreto




Del alba de la roja llaga


Alba, alba, que la noche ahueca el ala, alba brava/
que me desarma haciéndome/
de ancho mar, de río grande, de calma caliente en silo de nido/
en verte y llegarte sobre este simple destino/
que une, reparte y clava el sentido/
en la cruz, en mi suerte, en mi centro tu vida y mi llaga./


Y el nudo al común verbo, suerte/
y paso de mi quimera al averno va un soplo,/
y aire no encuentro, y galga abierta que llega y que llega,/
que corre y que vuela por donde el amor hace:/
tal vez por la nada, tal vez pura,/
sólo segura con nombre oculto a voces./


Que yo ya sin miedo me quedo,/
arrancada al viento, goteada en suerte,/
en puro muerto peso donde/
se desmadejan estos dedos perversos,/
estos dedos ciclámenes auroras de naciente mundo/
se diluyen como guardas de espinas acechantes sobre este sol. A esta guarida/
de hembra común, solana, levantisca y quieta se acercan./
Corta./
Pulso incierto, nervio aterido de frío bajo el astro de potente rayo./
¿Por qué no me abrigas?/
Miedo sin acopio, de dolor sin/
asomo de descanso, suma, bienvenida a/
este parto por dentro, me parto, me desgajo, me destronco de mis células internas en la buena muerte del espejo dorado que atraviesa/
mi vientre de parte a parte hasta romperme en dos, diez, un millón de mí.../
Y echo mano. Y otra mano, y no recojo ni ninguna ni nada./
No-doy-abasto./


Estos dedos, estos dedos/
que han dejado de ser carne o ley de éstos desleídos en el aire sin olor de llama./
...Que me abandona, ¿que debo abandonarlos?, que me abandonan./
Que del aire se han hecho.../


Los esculpiré en la piedra, como la cumbre llaga come/
la cumbre boca que no atraviesa a la llama, de piedra/
callada, dura y fuerte como roca: roca quebradiza, roca que te quejas, roca gime, roca viento y muerte,/
roca, roca lesa, roca nada./
Desarmada./
Como la ola abierta en la playa... ¿qué quedará más que espuma así seca, absorta, tan sólo sorbo para la arena de la orilla?/

Voy, voy, voy al porvenir, a las duras suelas, a la llama viva,/
a la carne prieta./
Ven, ven, ven,  amor,/
a quebrar el horizonte, a saltar de vela en vela,/
que no hay nada más vivo que su sonora llaga./
Voy, ven, vamos ya, amor,/
que veremos cómo los geranios se rompen en flores llamas./


Cumbre de llaga, enterrad. Cumbre de llaga devuelta/
de empacho de luz,
de amor llama llega la inocente llaga. Roja. Generosa. Viva.
...Qué bonito parirte, mi flor, ¡qué bonito!.../
Qué bonito y cuánto vivo./
Cuánto vivo, dolor, cuánto vivo aunque tanto ya muera./

Sofía Serra, 14 abril 2010

(Este poema lo he terminado de escribir con la intención de regalárselo a mi amiga Eva Márquez con motivo de la presentación de su poemario "Retales de estrógenos". Leer más aquí.)

lunes, 12 de abril de 2010

Entrada a la entrega


Título de la fotografía: Aquí, para ti... ¿y tú?

Soneto en justicia

Nada palabra va hueca palabra malabar juego de sílabas sueltas blancas palomas volando devueltas del todo, desde ti al aire en el abra que transita por los valles sin labra de asueto o mismo destino en revueltas de verde y líquidas pieles disueltas en vino verdad, viento, ¡sal!, que me abra tu fuego a tu labio que me embelesa en mesnadas de boca, en abrazo a tu carne en mi profunda remesa de alba bravía a tu claro embarazo gozoso de mí en tu entrada ilesa en luz de amor guardada en mi regazo.

Sofía Serra, 12 Abril 2010

sábado, 10 de abril de 2010

Que no vuelvan a pasar...ya hace casi 75 años

No lo idolatro pero estoy con él, porque si lo inhabilitan a él, nos silencian a todos.
DE NUEVO.

NO LO CONSINTAMOS


viernes, 9 de abril de 2010

Soy ciudadana española, APOYO AL JUEZ GARZÓN

Soy ciudadana española, no van a usurparme más mi derecho a decirlo.

Lo que estáis haciendo al acusar al juez Garzón es un acto que atenta contra mi propia dignidad como ciudadana de un estado democrático.

Cometéis fraude de ley, estáis pervirtiendo el sistema legal.  Ese acto constituye un delito  contra el propio estado y todos los ciudadanos que lo constituimos

 Estáis  dando un GOLPE DE ESTADO contra el estado de SOCIAL de DERECHO

Seréis  juzgados  como DELINCUENTES

martes, 6 de abril de 2010

Sacra Primavera

Título de la fotografía: El árbol del amor


La historia del amor en paz

No hay nada que hacer y queda todo./
La paloma necesita vuelo y nido, nolo y volo./
Vuelan mareas y perdices por el cielo./
y tus sostenerlas con las cuatro manos que no posees, que dos mías, mías, y sí, tuyas,/
pero mías también./
¿Acaso das más sol por esconder tus manos bajo las axilas?/
Es que se hicieron para voltear al viento,/
qué bien se preñan, pobrecitas mías./
Ya tendré que dejar, ya tendré que dejar/
las palabras olas que salgan ellas solas por la boca de la exclusa/
sin lápiz y sin aureolas de media tinta, qué bonitas son, qué hermosas suenan/
rascadas sobre el papel que ya se muere ¡a dios gracias, ya se muere!/
Ni el soldado herido se levanta, ya todo muere, ya todo,/
sí, quieto, yerto frío, muerto,/
nevada en la nariz del soldado muerto bocarriba,/
casco roto, cerveza sangre, joya viva ya sin sé mí o soy tú./
Nolo./
Lo no./
Lo-no debe ser tal vez completo equipo de batalla./
para perdernos sobre este campo limpio/
de ti y de mí, que ¡qué bien se surca!,/
y ya las cruces de mayo levantan su bandera/
anunciando flores sobre las tumbas/
del niño sol y la duende milagro./
Pasaré por mí hasta desencontrarte, porque yo ya/
me retuerzo como perra rabiosa acorralada/
con mis ojos inyectados en sangre/
de tanto dolor, tanta proclama sobre el orbe,/
tanto inútil comunicando, tanta artillería en batallas parciales,/
tanto somos, tanto no vales; tanto tú, tanto tú, tacto tú para la muerte, el noli me tangere/
cuando la otra boca habla./

Se me olvidan las penas./
se me olvidan las penas dando luces al ejercicio de tu caricia./
Se me olvida quebrar el horizonte,/
preguntarle a la esfinge y hasta fotografiar a las vallas./
¿Será que no soy mía?/
¿Será que soy tuya?/

Quiero quedarme con lo puesto,/
con lo tuyo, con las ropas harapos que me descubren./
Deja que te ame como el sol y la yerba lo hacen,/
sin medida, sin conquista, sin juicio previo./
Déjame amarte a todas luces en tu tierra abierta, sembrando a destajo en/
tu cuerpo/
tactos de amor, margaritas comprometidas con el verbo, la luz,/
tu perfil de guerra encendida contra ti, las miserias y esos fueros, que fueran de otros más uno,/
uno a uno más amor desde ti como yo./
Estos versos son mis manos y tus miembros:/
No, no te hechizaré,/
cumpliré sortilegio en la verdad para que te posea y, así,/
no tengas que molestarte en buscarla./
Ellos saborearán la cruel batalla./

Amor, déjame amarte como tú has sido, como bebes/
de tu ola,/
como juzgas tu renuncia, como pliegas en mareas/
de velo y luminoso suelo/
mi piel ajada, mi asomo de terciopelo, Amor, déjame amarte tal como eras/
y sigues siendo./
Sólo luz quiero para estos caminos andados/
bajo la sequoya, el vértigo y la espina,/
sólo amar bajo este techo,/
sólo verbar en silencio,/
sólo sostener tu aliento con mi boca para que no te derritas/
como hielo,/
que mi dulce sal te embargue, te embarque en el lirio a todas horas,/
en este lirio de abril, este amor de más y luz,/
este sol tan repetido, esta mi luminaria encendida ya tan vieja y nueva/
como cada ola, cada regusto de ti, cada saliva tragada por mor/
de tu pureza, tu necedad, tu elocuencia,/
por amor a ti, Amor, que me haces a todas horas./
Yo no soy nada, Amor, nada nombrable, nada equiparable./
La fría dama y el estéril caballero te disputan,/
te doblegan en silencio mientras al cielo clamas/
por un perdón más justo, más sabio, más bondadoso y bueno nuevo de ti./
La luz en tu color y en tus ojos/
tercia arremetida por esta verdad que yo no poseo./

Déjame acariciarte como viniste al mundo,/
como naciste, Amor puro y suelto, déjame armarte/
sobre la yerba como un mecano de flores/
enrojecidas destilando savia a cada llanto y quebranto y justas, y voces, y silencio/
y yerba acariciándote todo como yo más allá del verbo/
la carne, el juego, la luz/
y la vida, déjame profanarte, enterrarte como semilla/
bajo las yemas de mis dedos,/
déjame utilizarte para prenderte en mi labio, en mi muslo,/
en mi cuello, déjame construirte desde mi pecho, mi nalga, mi asiento/
déjame ser suelta de ti, bando de palomas alzando el vuelo/
sobre tu ombligo y tu sien esculpida a besos/
que yo amor soy, Amor, amor tuyo puro. Amor desde ti/
y yo, que ya paseé sobre la espuma,/
que azoré a la yerba hasta esquilmarla,/
que viví justo en tu contenido cumpliendo amor,/
cumpliendo abolengo, cumpliendo justas,/
amando verbos, amando escalas, amando Míos.../
Yo, que niña sorteada a la belleza de ser grande y noble./
Yo, que jamás te presenté batalla./
Yo, que viví para engrandecerte, para cimentarte,/
para colmar vacíos de otras bocas, para que desde ti abarataran sus soberbias, y soberbia/
llaga que ya me abandonas,/
llaga que ya me luce en esta bóveda cristalina alma/
ya te trasparentas solícita, niño sol que me preguntas, Tú,/
¿cómo voy a explicarte sobre la muerte/
si eres todo vida,/
vida, mi vida, vida, mi suerte blanca o negra, pecho abierto no querías?/
Patio extendido y comunicando temblores de vivo manjar hacia las piedras/
eso soy: amor, puro amor lleno derramándose./
Ay, si las parcas estepas me hubieran conocido.../
Ay, ay, ay.../
Ay, Amor de mí, qué distinta sería la tierra ahora./
Ay, Amor, ¡ay!, ¡renace cuando yo me muera!,/
que yo ya te conozco, Amor, que yo tu bravo soldado soy.../
Ay, si nieve, pues que venga./

Sofía Serra, 5 de abril 2010
 
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