martes, 11 de septiembre de 2012

Pudiente

Pudiente

Antesdeayer
Escribí un poema
Para celebrar
Tu adviento voy
A seguir pidiéndote
Para así poder darte
Un final feliz
Herrumbroso y seco
De navidad o diciembre
Sin ninguna carga
De misterio: el amor
Todo lo puede.

Sofía Serra ( De Solenostemon)

lunes, 10 de septiembre de 2012

Como el no

Como el no

Tú frente al mar y encerrado
en el frío luto de los pasos
de tu frente sobre las migas
y tú abierto y eterno no
socavando cada peso de la habitación
donde el pecho respira minucioso
ondeando el leve viento y tú
frente a ti entretenido
en tu boca tánatos del mundo
resecando los pequeños signos cantores
con ese daño como daño…

Eros fue convocado en la tierra y se ausentó.

Sorbe como la escabrosa causa
introduce sus venéreas raíces
extendiendo su vientre indoloro
apenas más que una leve comisura una
apenas rendija por donde se escapa
sola y lenta mi de ser de ella una
me rehunde y me enhorca en su temblor
como si sólo fuera apenas roca el no
apenas humus reflejo apenas
evaporado grisú de sus sales…

Escribían negros texturizados
como si la piel y el sexo
y las caricias y el sudor y los besos
y el lamento
y el consuelo y el dolor y el deseo
y el ombligo
y la sangre la sangre la sangre
pudieran desmenuzarse en hormigas:
la marabunta.

Se ha pervertido El Grafos
como si-no los cuerpos
ni los huesos ni la carne
como si-no engendraran
como sino él hubiera nacido:
Huevo huero tras
tanta hemorragia
sin embargo.

Sofía Serra (DE La dosis y la desmedida)

Como un árbol desnudo

Creo que por fin he podido saber cuál ha sido mi canción preferida desde siempre, desde allá por los quince años cuando la descubrí, el segundo vinilo que pude comprarme con "mi" dinero (bueno, sí era mío ahora que recuerdo, sobran las comillas, lo había ganado dando clases particulares), Luis Llach en el Olimpia: Com un arbre nu.




Com un arbre nu,
com dibuix fet al vent,
com un arbre nu,
jo, l'ocell.

Com del mar un port,
món silent,
cau d'amor,
com del mar un port,
jo, el vaixell.

L'infinit tot d'un cop
i el silenci absolut.
Som el món sencer
i també el no-res.

Tanca els ulls: som esperit.
Obre els ulls: som el cos.
Som la llum del sol,
de la nit la foscor.

Com un llibre blanc
on hi ha escrit el meu nom.
Com un llibre blanc,
jo, aquell mot.

Com una cançó,
joc del so
joc del to.
Com una cançó,
jo, l'acord.

domingo, 9 de septiembre de 2012

Maná de carnívora

Maná de carnívora

Siempre te relacionaré
Con mi estómago,
Tú ya lo sabes.

El nudo se me ha hecho un silencio.
Desde él hablo al ente
Sumergido bajo el barro negro
De la injusticia sobre ti.
¡Qué ibas a hacer sino imperiar?
¿cómo si no cazar cervatillos
mamuts o bisontes?
La hembra en el nido
Curtía tu armiño
De noche en descanso
El sol ahuecaba al día
Para hacer lugar
A tus ancas de jilguero
Recolector de las semillas
Que introdujeron algunos manes
En tus testículos
Cómo no averiguar
Su color y su forma
Si las zinnias ya florecían
Allá por el pleistocénico
Deseo de abrir la trampa
Y la broma de los metales
Que escanciaron sobre tu glande,
Y yo, la orfebre y
bruñidora,
Cómo no tallar
Con mi lengua
El lento y blando
Relieve de tu isla y su palmera
Cómo no pulir
Con mi boca,
Muñequilla de lienzo
Nacarada por los pinceles
De la historia blanca
Abrillanto en círculos
La longitud de esos canales
Mis ríos de legítima abundancia
De ti y tus simientes
Cómo no soñar sobre su color
Y tu sonrisa de perfil
Al cielo
Mana
La densa y líquida niebla
Que abruma mi hambre
Y me alimenta con tu salida
En busca de la carne
Que nos hizo más inteligentes.
Simplemente,
Mejor alimentados.

Como yo.

Qué dibuja las circunvoluciones
De mi cerebro
Sino el silo
Grande de tu glande
Y mi enorme deseo

De justicia
Sobre
Ti.

Sofía Serra ( De Solenostemon)

Pecado original

Pecado original

En un lugar del alma
existe el dios que dicen
todos llevamos dentro,
tú más tú sobre el aire
y la nada, tú más
el todo que abarca
y abraza en consuelo
el silencio que nutre
y agiganta y hace vivo
a ese ser que otros dicen
expulsaron de aquella suerte.

En el torno de las Eras que hacemos
con la boca o con los ojos,
ya en la luz, ya en la mancha
del lugar que nos despidió,
habita el inocente que, palabra a palabra,
engendra el tiempo, cumple
venganza contra la mudez
inexcusable del canto divino
y hace carne en el verbo
por mor del secreto a voces.
Los ángeles duermen pacíficos,
pero las palomas de la presencia
levantan vuelo musitando
con sus alas: aleteo va,
aleteo llega, se dicen (aman) felices:
“¡El hombre habla, el hombre habla!...”

Y el mundo se hizo.

(Sofía Serra. De Del bestiario de los inocentes)
 
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